Ruta arqueológica Braga, Citânia de Briteiros y Castro de Monte Mozhino

DÍA 1 viernes 26 de abril. Viaje a Braga

• 15.30 h Salida de Gijón (Muelle de Fomento junto a las letronas)
• 20.30 h Llegada a Braga
• Duración del viaje 5 horas
• Cena y paseo nocturno por Braga libre

 DÍA 2 Sábado 27 de abril. BRAGA Y CITADINA DE BRITEIROS

Mañana

• 10.00 h Museo Arqueológico Diogo de Sousa
• 11.15 h Termas Romanas de Braga
• 12.15 h Fonte do Ïdolo
• 13.00h Balneario Prerromano
• 13.30 h Comida en Braga. Elección libre

Tarde

• 15.00 h Salida de Braga a Citânia de Briteiros 22 min (16,6 km)
• 15,30 a 17.00 h Vista a Citânia de Briteiros
• 17,30 h Salida de Briteiros a Guimaraes  23 min (14,5 km)
• 18,00 a 19,30 h Visita Guimaraes
• 19.30 Salida de Guimaraes a Bragra 45 minutos 31 km
• 20h 30 Llegada a Braga Hotel
• 21.00 h Cena de grupo en el restaurante Ben-me-quer Campo das Hortas 6, 4700-210 Braga.

Día 3 Domingo 28 de abril. CASTRO MONTE  MOZHINOS Y AMARANTE

Mañana

• 9.30 h Salida  de Braga a Monte Mozhino 90 minutos 1,30 horas
• 11,00 h a 13,00 h Visita al Castro de Monte Mozhino
• 13,30 salida de Monte Mozhino a Amarante 35 min (35,2 km)
• 14.15 Comida en Amarante

Tarde

• 15,30 horas Regreso a Gijón por Verín, Pola de Sanabria y Benavente (4h50 minutos)
• 22.45  horas. Llegada a Gijón

NOTA IMPORTANTE:

• La reserva de hoteles y comidas corre a cargo de cada participante
• Se organizará una cena el sábado para compartir entre los participantes que lo deseen y previa reserva

 ¿QUÉ VAMOS A VER?

Tomando como base la ciudad de Braga, vamos a disfrutar de un viaje arqueológico para seguir conociendo la cultura castreña y la romanización del territorio del noroeste de la península Ibérica. La mañana del sábado la dedicaremos a Braga, por la tarde visitaremos la Citadina de Briteiros, después una parada en en Guimaraes, para regresar a Braga y compartir una cena de grupo. El domingo visitaremos el Castro de Monte Mozinho,  pararemos en Amarante para comer y seguir viaje de vuelta a Gijón.

BRACARA AUGUSTA. Braga

El nombre de los Bracari aparece, por primera vez en la Historia, en el siglo II a.C., a raíz de la primera expedición militar romana al Noroeste de la Península. En el año 137 a. C., las legiones comandadas por Décimo Juno Bruto, derrotaron a los lusitanos.

No obstante Bracara Augusta fue fundada en siglo I a. C., tras las campañas de Augusto, futuro primer emperado. Este es uno de los tres principales centros urbanos del noroeste peninsular y su importancia viene determinado por estar asociado durante cinco largos siglos a seis de las grandes vías romanas que cruzaban la Península Ibérica y que partían desde aquí hacia todas las direcciones de Hispania.

Como capital del Conventus Bracarensis, tienen importantes funciones judiciales, fiscales, administrativas y religiosas. Bajo los Flávios conoce un gran desarrollo económico y urbano, que posteriormente justifica su elevación a capital de la provincia de Gallaecia, creado por Diocleciano. Bracara Augusta siguió siendo durante el siglo IV, una ciudad floreciente convirtiéndose en sede del Obispado. Después de la caída del Imperio Romano en Occidente y las invasiones bárbaras, surge como capital del Reino Suevo. A mediados del siglo VI, la ciudad sigue siendo un importante centro religioso y cultural. Su declive y abandono llegó con los sucesivos ataques y destrucciones árabes.

La ciudad medieval se construyó sobre la ciudad romana, que comienza a ser investigada por los arqueólogos a partir de la década de los años sesenta del siglo pasado hasta la actualidad,  dando como resultado un inmenso y rico tesoro arqueológico recuperado y conservado en el  Museo Regional de Arqueología D. Diogo de Sousa, y visible en un conjunto de yacimientos arqueológicos urbanos.

Visita guiada al Museo D. Diogo de Sousa

El Museo D. Diogo de Sousa, creado en 1918 y nombrado así en honor al que fue arzobispo de Braga entre 1505 y 1532.. La colección se exponen cronológicamente y divididas en cuatro salas y contiene pieza de toda la región Norte de Portugal permitiendo un recorrido por la historia de Bracara Augusta, desde la época Paleolítica hasta la Medieval.

 Termas do Alto da Cividade

El área excavada del yacimiento termal ocupa aproximadamente 850 metros cuadrados, aunque sus instalaciones eran eran mas extensas.  Fueron construidas a finales del siglo I dC(época flavia), y constan de cuatro salas calientes cuyos hipocaustos están relativamente bien conservados y el resto de los espacios propios de unas termas romanas. Al lado de las termas se ha descubierto un teatro romano que se está excavando en la actualidad

Los baños prerromanos de Braga

El balneario de Braga, (Siglos II-I a.C.) podría ser el más antiguo de los diez descubiertos, hasta ahora, en el norte de Portugal. Su datación coincide con la expedición de Décimo Júnio Bruto. Este balneario prerromano está en el origen de la ciudad de Braga a la que Plínio se refiere como un oppidum, lo que llevó a numerosos autores a considerar la existencia de un asentamiento fortificado de la Edad del Hierro en el Alto da Ctividade, que sería la capital de los Bracari. Otros autores como Schulten, creen que la fundación de Bracara tuvo su origen en un campamento romano, aunque esta teoría paraece hoy muy discutida ante la falta de testimonios arqueológicos que la respalden. Las ruinas del Balneario Prerromano, quedaron integradas en el solar de la estación de tren,

Fuente del Ídolo

Fue construida en tiempos del emperador Octavio Augusto. En ella encontramos unas inscripciones en latín, dedicadas a las deidades lusitanas Navia y Tongoenabiago.  Celico Frontón fue quien la construyó. Fue identificada por primera vez por el cartógrafo alemán Georg Braun, que lo incluyó en su mapa de Braga en 1594. La fuente es una supercicie de granito, formando un respaldo alargado, que mide unos 3 metros de ancho y 1,20 metros de alto. A la izquierda de la roca hay una figura humana tallada, de aproximadamente 1,10 metros de altura.

Citânia de Briteiros

Situada a pocos kilómetros de Guimarães, es uno de los asentamientos protohistóricos más expresivos de la Península Ibérica, por el tamaño y la monumentalidad de sus murallas, su urbanismo y su arquitectura.

Dispone de un conjunto de murallas, en cuyo interior encontramos viviendas de planta circular o rectangular,  La Citânia de Briteiros es uno de los yacimientos paradigmáticos de la Historia de la Arqueología Portuguesa y Peninsular.

La ocupación de este lugar en el monte de São Romão se remonta al Neolítico Final y al Calcolítico. Hay grabados rupestres en los acantilados de granito de la parte este de la ladera.

El castro es de la Edad del Bronce  aunque su mayor crecimiento lo tiene a partir del siglo II a.C., Siguió habitado tras la romanización hasta el II d.C. En el siglo X, se construiría una pequeña ermita cristiana en la acrópolis, entre los restos del antiguo asentamiento.

 Castro de Monte Mozinho

Castro de Monte Mozinho está situado el municipio de Peñafiel. Es un gran recinto fortificado en lo alto de una colina desde se domina todo el paisaje y el valle por el que discurre el camino que conecta esta zona con el río Duero.

Se trata de un castro fundada entre finales del siglo I a.C. y principios del I d.C., y ocupado hasta el siglo V. Está fortificada con dos murallas y tiene una superficie de 22 hectáreas. En su interior pueden apreciar conjuntos de cabañas castreñas de tipo circular y viviendas romanas, de planta cuadrada o rectangular.

En la parte superior del castro destaca la muralla del siglo I, cuya entrada estaba flanqueada por dos torreones donde se encontraban dos estatuas de guerreros galaicos. La cima del castro está coronada por la acrópolis, delimitada por un grueso muro, con edificaciones en su interior.

Las investigaciones sobre el Castro de Monte Mozinho se remontan a principios del siglo XIX, y se ido excavando hasta principio de este siglo. Fue musealizado e inaugurado en 2004.